Zarzalejo, una de las
primeras localidades españolas adscrita a la red de comunidades en
Transición, cuya forma de vida propone unaalternativa al consumismo, la tiranía
de los mercados y la dependencia del petróleo que caracteriza nuestras
sociedades, promoviendo otros modelos de economía verde y
participativa, regida por la conciencia social. Una experiencia para,
como dice una vecina de esa localidad “ir del sueño grande a lo concreto, y de
lo concreto al sueño”
Un pueblo serrano y la filosofía del
decrecimiento.
En un paisaje
verde salpicado de moles graníticas, Zarzalejo conserva su fisonomía de pueblo
serrano: una retícula de calles en torno a la sencilla iglesia, casas de
piedra, una estación de tren, montañas que lo abrigan todo y que presiden el
núcleo urbano porque no hay construcciones que las tapen. Aún no ha prosperado,
como en otras poblaciones cercanas a Madrid, algún plan de ampliación que
arrase el entorno y duplique el área urbana con edificios clónicos o
monstruosos centros comerciales. Se diría que aquí la vida transcurre pendiente
de las estaciones, que a ratos puede escucharse el silencio en la plaza, y que
la mayoría de sus vecinos se conoce, al menos de vista. Entre ellos hay más de
cien familias cuya vida participa del Movimiento en Transición, una iniciativa
que surgió en Totnes, ese pueblecito inglés donde los niños ya piensan en la
vida sin petróleo de sus nietos. Fue en el año 2006, cuando sus habitantes,
inquietos por la perspectiva de ese futuro, se reunieron para ver de qué modo
podrían asegurar al menos la autosuficiencia de su comunidad. Uno de los
organizadores era Rob Hopkins, que a partir de aquí fundaría el movimiento
extendido hoy por miles de comunidades de más de 50 países. Hopkins ha dado la
vuelta al mundo impartiendo conferencias y cursos que promueven la reflexión
acerca de nuestros hábitos, buscando estrategias
para la sostenibilidad y
la gestión local de recursos, energía o alimentos.
La filosofía
de la Transición
bebe en las fuentes del decrecimiento,
que propone un freno controlado a la progresión enloquecida del sistema
económico actual y su hiperdesarrollo tecnológico, su dependencia del petróleo
y su desastroso impacto sobre el planeta. Los grupos en transición, que
funcionan con participación asamblearia, plantean estrategias económicas de
donación, trueque o incluso moneda social, para no depender de la oligarquía y
las fluctuaciones del actual sistema monetario. ¿Utopía? ¿Ciencia ficción? No,
en Totnes —como en otros lugares en transición— ya circula la moneda local: el Totnes Pound.
España tiene
una importante Red de Transición con más de 40
iniciativas en la península y las islas. En Zarzalejo, una
de las localidades pioneras y quizá la más representativa, el movimiento entró
con fuerza en 2011 tras unas charlas impartidas por Javier Zarzuela, que como
Hopkins ofrece cursos por todo el país. Aquí encontró un numeroso grupo de
personas, también de los pueblos vecinos, que tenían muchas ganas de hacer
algo. Y que lo
hicieron.
Las
diferentes culturas han contado sus historias reconstruyendo el pasado y, por
otra parte, imaginando el futuro. Los relatos más populares tienen que ver con
que alguien va a solucionar los problemas del mundo por nosotros y, además,
están los relatos que señalan que todo está a punto de venirse abajo.
La historia de los vecinos de Zarzalejo es
bastante diferente de las historias más populares anteriormente comentadas. Su movimiento de Transición es
el esfuerzo colectivo de más personas cada día, que optan por organizarse y
hacer frente al pico del petróleo y del cambio climático a través de
iniciativas en sus comunidades.
Comunidades resilientes y sostenibles
En el contexto comunitario, la resiliencia se
refiere a la habilidad de no colapsar frente a la falta de energía o de
alimentos, y a la habilidad para responder ante estos choques de origen
externo.
Las características de una comunidad resiliente
son: diversidad, descentralización, autonomía y flexibilidad. Las prácticas más
comunes que lleva a cabo el Movimiento de Transición en Zarzalejo son: fomentar la
creación de huertos urbanos, plantación de árboles productivos, construcción de
casas junto con la mejora del aislamiento de las mismas con materiales de
la comarca, recogida y reutilización de desechos; creación de bancos de
semillas y de plantas medicinales, creación de talleres de aprendizaje de
labores tradicionales, instalación de paneles solares, creación de sistemas de
trueque, monedas locales, cría y cuidado de animales de tiro, mantenimiento de
granjas avícolas y producción sostenible de leña.
No hay comentarios:
Publicar un comentario